UC - Críticas
| País: Estados Unidos. Año: 2017. Género: Drama Erótico.
Dirección: James Foley. Guion: Niall Leonard (Novela: E.L. James). Fotografía: John Schwartzman. Productora: Universal Pictures.
Distribuidora: Universal Pictures Spain. Estreno en España: 10 Febrero 2017. |
Interpretación: Dakota Johnson, Jamie Dornan, Bella Heathcote, Kim Basinger, Hugh Dancy, Eric Johnson, Max Martini, Eloise Mumford, Luke Grimes, Rita Ora, Tyler Hoechlin, Marcia Gay Harden, Fay Masterson, Robinne Lee. |
DE BOLAS CHINAS Y CHOCOLATE ESPESO
'Cincuenta Sombras Más Oscuras' es la inevitable secuela del fenómeno de masas (literario y cinematográfico) que supuso 'Cincuenta Sombras de Grey' (Sam Taylor-Johnson, 2015), ahora dirigida por un artesano como James Foley, prometedor autor que en sus inicios realizó películas tan destacables como 'Hombres Frente a Frente' (1985) o 'Glengarry Glenn Ross (Éxito a Cualquier Precio)' (1992), y que aquí se demuestra como un director mucho más torpe y anodino que, además, ya se ha postulado como director para la tercera entrega de esta saga pseduoerótica que llevará como título 'Cincuenta Sombras Liberadas'... Y es que este fenómeno de masas se escapa a mi lógica. Si bien la primera entrega tenía algún aspecto rescatable, esta segunda es un desastre absoluto.
SINOPSIS: Cuando Christian Grey, que se siente herido, intenta convencer a Anastasia Steele de que vuelva a formar parte de su vida, ella le exige un nuevo acuerdo antes de aceptar. Pero cuando la pareja empieza a ser más confiada y a tener una cierta estabilidad, aparecen mujeres del pasado de Christian decididas a frenar en seco sus esperanzas de un futuro juntos... Secuela de "50 sombras de Grey", en la que Grey sigue explorando sus demonios interiores y la joven Anastasia confronta sus sentimientos y confusión sobre su relación con el atractivo millonario, un tipo misterioso lleno de secretos.
'Cincuenta Sombras Más Oscuras' parece un telefilm de los años 80, cuando en el cine existía el género del thriller erótico, una época donde aún no existía internet en las casas, ni el acceso inmediato al sexo fácil y la pornografía de hoy en día, así que el erotismo de postal servía para calentar las plateas cinematográficas con films que ahora parecen de lo más inofensivo como '9 semanas y media' (Adrian Lyne, 1986) o 'Orquídea Salvaje' (Zalman King, 1990), tal vez por eso el guiño de contar con Kim Basinger en un pequeño papel. Pues la saga de Grey parece sacada de esa época, pero sin el significado que tenían aquellas películas en aquel momento, y resulta difícil de entender que pueda despertar el más mínimo interés sexual en las nuevas generaciones, tan a vuelta de todo. Más aún si cuando la introducción del elemento sadomasoquista, esa pretendida oscuridad del personaje masculino que en esta segunda entrega se suaviza hasta un extremo infantiloide, se utiliza de un modo velado para no espantar al público femenino más tradicional (sexualmente hablando). El resultado final es un drama romántico que juega a ser "malo" donde se suaviza la toxicidad y el machismo de la primera entrega, quedándose en un terreno de nadie, bastante menos oscuro y bastante más espeso que, por momentos, se convierte en una autoparodia tan risible como absurda.
Poco o nada puede rescatarse de 'Cincuenta Sombras Más Oscuras', ni siquiera parecen creérselo ya los propios protagonistas Dakota Johnson y Jamie Dornan. Y es que el guion de esta segunda entrega es malo de solemnidad, la realización plana e inoperante, la fotografía edulcorada hasta el empacho y todos los juegos eróticos que se proponen (las bolas chinas, el baile de máscaras, el ascensor...) resultan tan excitantes como ver un documental sobre la sexualidad de las plantas. Lo peor de todo es saber que aún nos espera (como mínimo) una tercera entrega y que seguirá haciendo dinero en taquilla.
TRAILER